Un joven organizó un falso secuestro en el cual mantuvo cautiva a su novia para robarle a su suegro. El delito ocurrió en el partido bonaerense de Lanús el pasado 23 de julio, pero salió a la luz ahora, después de que los investigadores descubrieran que él estuvo involucrado en el macabro plan.
El acusado tiene 19 años y su novia 17. Según trascendió él llevó a cabo el secuestro en complicidad de un grupo de amigos, quienes ahora permanecen detenidos a disposición de la Justicia. El padre de la víctima había pagado 40 mil dólares y 5 millones de pesos de rescate.
De acuerdo a la información a la que accedió TN, el día del rapto la adolescente y su novio habían planificado pasear en un centro comercial. Él le dijo que había pedido un auto desde su celular en una aplicación de viajes. Cuando llegó ambos se subieron y emprendieron viaje, sin embargo, a mitad de camino salió un hombre del baúl y junto al conductor tomaron de rehenes a la pareja.
Una vez en cautiverio, los llevaron a Guernica donde permanecieron secuestrados durante 6 horas, el tiempo que tardaron en negociar con la familia de la chica. El padre de ella es un empresario que trabaja con frigoríficos en la zona sur de la provincia de Buenos Aires. En un momento llegan a un acuerdo y el hombre pagó 40 mil dólares y 5 millones de pesos. Finalmente, los novios fueron liberados.
Hasta ese entonces se creía que las víctimas habían sido la chica y su novio. Pero durante la investigación, los especialistas tomaron en cuenta algunos detalles que declaró la adolescente. Por un lado, había dicho que cuando el auto llegó les tocó bocina y que eso le pareció raro porque al pedirlo por aplicación, ellos supuestamente tendrían que haber visto cuando el auto iba llegando.
Por otro lado, contó que cuando estaban en cautiverio, el novio le intentaba sacar información sobre dónde estaba la plata de su papá, sabiendo que el hombre iba a utilizar una elevada suma para una operación inmobiliaria. Esta información aportada por la víctima llamó la atención de los expertos que empezaron a investigar una posible relación entre el joven y los secuestradores. Hipótesis que fue confirmada al descubrir la triangulación de llamados entre los acusados y del novio de la víctima.
También pudieron confirmar que el joven nunca había pedido un auto a través de la aplicación de viajes y así supieron que el vehículo que los trasladó, que terminó siendo el de los secuestradores, era conducido por los amigos de él. Por eso, los fiscales Sergio Mola y Santiago Márquez que quedaron a cargo del caso, ordenaron el arresto de él y cuatro de sus amigos. Hasta el momento son cinco los detenidos, pero buscan a dos más que permanecen prófugos de la Justicia.