El intendente de Bariloche, Walter Cortés, quedó a un paso del juicio político por la adquisición de una homigonera que duplica los precios de mercado. La máquina fue comprada a una concesionaria de autos a través de una intermediaria que modificó su actividad ante la AFIP luego de cerrar el negocio.
Cortés ganó la intendencia con menos del 20% de los votos en 2023. Tiene solo 3 de los 11 concejales del municipio y para destituirlo hacen falta 8 votos. En los pocos meses que lleva al frente Bariloche recibió varias denuncias y fue condenado por violencia de género.
La reparación de las calles de Bariloche fue una de sus promesas de campaña. Cortés decidió avanzar con una compra que ahora será investigada por el tribunal de cuentas. A horas de que termine la emergencia económica votada por el Concejo Deliberante, el intendente decidió pagar 192 millones de pesos para adquirir una dosificadora de hormigón.
El proceso estuvo plagado de irregularidades. En la primera resolución emitida, el municipio ni siquiera especificó que máquina había comprado. Cortés intentó enmendar el error en una segunda resolución que también fue cuestionada por la oposición. La tercera resolución fue publicada tras el fin de la emergencia económica y sirvió para tomar deuda por 2 mil millones de pesos y agregar nuevas compras de maquinaria. Esas cuestiones debieron pasar por el Concejo Deliberante.
La compra fue denunciada por el concejal Leonardo Costa Brutten y el Tribunal investigará «si existió triangulación» en la adquisición de la maquinaria, y «si existió o no sobreprecio».
El gobierno tiene la obligación de pedir 3 presupuestos antes de avanzar con la compra. Cortés cumplió ese paso, pero solicitó los presupuestos a empresas que no se especializan en plantas dosificadoras de hormigón.
Según consta el expediente, la única que respondió positivamente es «Del Rey automotores». Como su nombre lo indica, no vende máquinas de construcción. Tampoco se llama «Del Rey» sino El Rey de los automotores.
Otra irregularidad es que el municipio no le pagará directamente a El Rey de los automotores, sino que trianguló la compra con F&J. Esa empresa cambió su actividad e incluyó las plantas de hormigón entre los rubros declarados ante AFIP unos después antes de que se concretara la compra.
Los dueños de F & J acumulan denuncias y condenas por estafa, secuestros y violencia de género, pero eso no fue un impedimento para que Cortés avanzara con la compra. Para alimentar aún más las sospechas, la factura por la compra de maquinaria es la número 7 emitida por la F&J , cuya sede social declarada está en una veterinaria de Mendoza.
Una de las cuestiones que llamaron la atención de los concejales, es que el municipio no incluyó en la compulsa de precios a Indumix, la empresa que fabrica la hormigonera, sino que decidió comprarla a un revendedor.
Luego de que estallara el escándalo, un concejal sí consultó a Indumix y pidió que le cotizara el precio de una máquina igual a la que había adquirido la municipalidad. Desde la empresa le respondieron y en lugar de enviar un nuevo presupuesto, utilizaron el mismo que habían enviado al municipio. El problema es que ese presupuesto está a nombre de Carlos Martín Criado.
Criado es el contador del sindicato de Comercio, que lidera el propio Cortés. Sin embargo, no está nombrado en la municipalidad. Por eso resulta inexplicable por qué el presupuesto tenga su dirección de mail.
Días atrás, el Alberto Weretilneck visitó Bariloche. En medio de la polémica, destacó la compra de maquinaria y aseguró que Cortés era un «líder». El gobernador tiene un bloque de tres concejales que son clave a la hora de decidir la suerte del intendente.
Cortés le pidió «gobernabilidad» a Weretilneck. Según pudo saber LPO, el ex senador habló con los concejales y les pidió que apoyen el presupuesto que presentó el intendente. Por ahora no les dio instrucciones sobre qué hacer en caso de un juicio político.