Tras no recibir la invitación para participar de una cena de camaradería organizada por las Fuerzas Armadas, la vicepresidenta Victoria Villarruel comunicó que este sábado no viajará a Mendoza a presenciar en la ceremonia por el aniversario de la muerte de José de San Martín.
Desde el entorno de Villarruel apuntan contra Karina Milei y la responsabilizan de no haberle hecho llegar la invitación a la Vicepresidenta. TN constató que ella acreditó prensa para el evento y que nunca recibió la invitación formal.
En relación a por qué se bajó del viaje a Mendoza, fuentes cercanas a Villarruel expresaron que “le bajó la presión” y que se quedará en Buenos Aires. Ayer, TN precisó que el llamado para ir a la cena en el Ministerio de Defensa estaba a cargo de la Secretaría General.
“Ella lamenta no estar presente. Conoce a todos ahí y le hubiera encantado participar de la actividad. Pero Victoria no tiene la costumbre de ir a dónde no la invitan”, explicaron desde su entorno. Según una fuente de la organización del evento, la vicepresidenta avisó que no iría 15 minutos antes del arranque del acto, estipulado para las 18.
En la sede del Ministerio de Defensa y del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas donde se realizó el evento también estuvieron Guillermo Francos (jefe de Gabinete), Luis Petri (ministro de Defensa) y Karina Milei.
Desde el círculo íntimo de Villarruel agregaron que al no recibir la invitación, la Vicepresidenta expresó: “No voy a ir a un evento al que no me invitan”. Esta situación es similar a la ocurrida el 8 de julio cuando Milei y 18 gobernadores firmaron el Pacto de Mayo en la Casa Histórica de Tucumán.
Aquel día, Villarruel también argumentó que su ausencia se debió a un severo cuadro gripal. Sin embargo, al día siguiente sí acompañó al Presidente en el acto por el Día de la Independencia. TN supo que el círculo de Milei puso en duda que Villarruel efectivamente se sintiera mal aquel día.
La relación entre Milei y Villarruel
El vínculo entre Milei y Villarruel sigue siendo distante. Desde hace tiempo que la Casa Rosada se despega de los dichos y acciones de la vicepresidenta, que mantiene una agenda propia, lejos del círculo íntimo del Presidente.
La última polémica ocurrió cuando la presidenta del Senado escribió en redes que Francia “era un país colonialista”. Su reacción fue para defender a la Selección Argentina, que había sido cuestionada por una canción racista en los festejos de la Copa América. El episodio desencadenó un pedido de disculpas por parte del Gobierno hacia la Embajada de Francia: Karina Milei fue la encargada de transmitir ese mensaje.