La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, firmó un proyecto de ley el 20 de junio que permitirá a los padres limitar el contenido que sus hijos reciben en redes sociales, restringiendo las publicaciones sugeridas por algoritmos de plataformas como TikTok e Instagram, así lo detalló ABC News. La normativa busca atacar lo que muchos críticos consideran transmisiones adictivas para los menores.
La nueva legislación, aún en implementación, establecerá que las aplicaciones limiten los feeds para menores de 18 años a las publicaciones de cuentas que ya siguen, evitando contenido recomendado por algoritmos automatizados. Además, se impedirá que estas plataformas envíen notificaciones sobre publicaciones propuestas entre la medianoche y las 6 a.m. “Podemos proteger a nuestros hijos”, afirmó Hochul durante la ceremonia de firma en Manhattán. “Podemos decirles a las empresas que no se les permite hacer esto, que no tienen derecho a hacerlo, que los padres deberían tener voz sobre la vida y la salud de sus hijos, no ustedes”.
El proceso legislativo ahora requiere que la fiscal general del estado, Letitia James, elabore las reglas que definirán los mecanismos para verificar la edad de los usuarios y el consentimiento de los padres. Una vez finalizadas estas reglas, las empresas de redes sociales tendrán un plazo de 180 días para cumplir con las nuevas regulaciones.
La normativa incluye disposiciones que los padres pueden anular al otorgar, lo que se define como “consentimiento parental verificable”. Sin embargo, Carl Szabo, vicepresidente y asesor general de NetChoice, grupo comercial que agrupa a organizaciones como X y Meta, expresó su desacuerdo. Según Szabo, “Este es un ataque a la libertad de expresión y a la internet abierta por parte del estado de Nueva York”, destacando que obliga a los sitios a censurar contenido a menos que el usuario verifique su edad con identificación.
Las plataformas de redes sociales importantes como TikTok e Instagram utilizan algoritmos que predicen y sugieren contenido para mantener a los usuarios enganchados el mayor tiempo posible. Estos algoritmos se basan en una serie de factores, incluyendo el historial de clics del usuario y las preferencias de otros con gustos similares.
A nivel estatal, otras iniciativas también buscan regular el impacto de la tecnología en menores. En California, el gobernador Gavin Newsom ha anunciado planes para restringir el uso de teléfonos inteligentes por parte de los estudiantes durante el horario escolar. Newsom ya firmó en 2019 una ley que autoriza a los distritos escolares a limitar o prohibir el uso de estos dispositivos mientras los estudiantes estén en el plantel escolar.
A nivel federal, aunque no se ha aprobado una legislación amplia, el tema sigue siendo objeto de debate en Washington. Recientemente, el cirujano general de Estados Unidos solicitó al Congreso la implementación de etiquetas de advertencia en las plataformas de redes sociales similares a las que se colocan en los paquetes de cigarrillos, argumentando los peligros que representan para la salud mental de los niños.
Ante estas presiones, algunas empresas tecnológicas han reaccionado. Meta, por ejemplo, ha introducido herramientas para limitar el tiempo que los niños pueden pasar en aplicaciones como Facebook e Instagram. Sin embargo, la legislación de Nueva York, propuesta por James, sigue siendo polémica. “Las plataformas de redes sociales manipulan lo que nuestros niños ven en línea para mantenerlos en las plataformas el mayor tiempo posible,” afirmó James. “Cuanto más tiempo pasan los jóvenes en las redes sociales, mayor riesgo corren de desarrollar problemas graves de salud mental”.
La nueva ley no entra en vigor inmediatamente y anticipa un complejo proceso administrativo y posibles desafíos legales por parte de las empresas tecnológicas afectadas. La aceptación de los padres y la implementación precisa por parte de las plataformas determinarán el éxito de esta medida en la protección de los menores en el entorno digital.