El gobierno se anotó otro triunfo en el Congreso y sostuvo el veto al aumento universitario. El bloque del PRO y los gobernadores peronistas de Tucumán y Catamarca, Osvaldo Jaldo y Raúl Jalil, fueron la llave para bajar el proyecto. También fueron fundamentales las gestiones del chubutense Ignacio Torres y el misionero Hugo Passalacqua.
Aunque la oposición logró reunir 160 votos, no llegó a los dos tercios necesarios para insistir con la ley. El oficialismo perdió a tres «héroes» desde el veto al incremento jubilatorio, pero llegó a los 84 votos. Cinco diputados se abstuvieron, cuatro misioneros de Innovación Federal y uno de los cinco radicales con peluca.
Pero, además, ocho legisladores se ausentaron, sospechados de allanarse a los designios de la Casa Rosada y sus persistentes llamados a los mandatarios provinciales. El macrista Héctor «Tito» Stefani estaba de licencia por enfermedad, al igual que el radical Fernando Carbajal, quien suele votar encolumnado con Facundo Manes. Oscar Zago, como informó LPO, se encontraba fuera del país atendiendo asuntos de su propia empresa y Ricardo López Murphy tuvo que viajar por un tema familiar.
Todas las miradas recayeron sobre la cordobesa Alejandra Torres, pareja del ex ANSES Osvaldo Giordano, y la catamarqueña María Fernanda Ávila. Torres adujo que contrajo Covid luego de un posteo por Twitter en el que anunció que hubiera votado a favor de las universidades. Ávila estuvo en el Congreso pero se quedó en su despacho, por orden de Jalil.
Tampoco viajó el chubutense Jorge Ávila, que dijo estar hospitalizado. LPO publicó que el gobierno de Milei acordó ese faltazo con el gobernador Torres.
Más temprano, Marcelo Orrego le avisó al presidente que sus dos diputadas votarían en contra del veto. Por eso el gobierno tuvo que maniobrar para conseguir un acuerdo con Osvaldo Jaldo.
El gobernador de Tucumán había pasado varios días hablando de la importancia de la universidad pública, pero los tres legisladores del bloque Independencia, Agustín Fernández, Elia Marina Fernández y Gladys Medina, apoyaron el veto presidencial al financiamiento.
Uno de ellos le dijo a LPO que su postura era a favor de las universidades pero que el mandatario provincial ordenó el apoyo. «Esto ya no se sostiene más, yo estoy de este lado», expresó apuntando a la manifestación en las calles, y se excusó en los llamados que Jaldo habría recibido de parte del jefe de Gabinete, Guillermo Francos.
Desde el mediodía, el subsecretario general de la Presidencia, Lule Menem, se instaló en el despacho de su primo y presidente de la Cámara Baja, Martín Menem. «Está Lule, están arreglando todos», anticipó un legislador opositor cuando se veía venir el resultado adverso.
A último momento, la salteña Yolanda Vega, miembro de Innovación Federal, «se descompuso» y se retiró del recinto. Parte de la tropa que responde al gobernador Gustavo Sáenz, se convirtió en la octava ausente al momento de votar.
En el bloque del PRO no hubo sorpresas: salvo Álvaro González y Héctor Baldassi, todos votaron como ordenó Mauricio Macri.
Silvia Lospennato realizó un largo discurso donde aseguró que el reclamo de los docentes era justo y exigió para el sector un aumento salarial similar al de los empleados públicos. «Esto no es un acompañamiento al gobierno, es un acompañamiento que está haciendo todo el pueblo argentino», dijo antes de rechazar el aumento universitario.