Aunque las primeras temporadas de Emily in Paris llevaron a Lily Collins por las mágicas calles de la capital francesa, la última parte de la serie transcurre en gran parte en Italia. Mientras que la moda ocupa un lugar fundamental en cada episodio, la actriz se afianza como ícono de estilo y ahora es tapa de la versión italiana de Vanity Fair.
En la impactante foto de portada, la estrella se luce con un llamativo equipo de sastrería a rayas negras y blancas formado por un saco de hombreras dramáticas muy entallado y un pantalón recto firmado por Balmain. El equipo, similar a uno de los vestuarios que usó en uno de los capítulos de la serie, se complementó con un top tejido negro, stilettos a juego y un peinado recogido.
Más allá de la extravagancia del look de tapa, la elegancia que tanto la caracteriza en la serie se hizo visible en el resto de los cambios de vestuario. Por ejemplo, en un minivestido voluminoso con pliegues tridimensionales de la misma casa francesa o en un diseño largo de silueta fluida con estampado en tonos pasteles firmado por Chanel combinado con una capelina rosa.
De la mano de la casa italiana Prada, se lució con un conjunto de top de mangas cortas tejido en color turquesa con una falda midi negra se silueta oversized y voluminosa, una tendencia que sin dudas fue la premisa del estilismo de toda la sesión de moda.
El 12 de septiembre es el día en que descubriremos el final de la historia de Emily junto con los prometedores looks que lucirá en las calles de Roma. ¿Estás preparada?