El plan del Gobierno para retrasar el tratamiento del DNU de los fondos de la SIDE naufragó apenas pisó el recinto del Senado. Los senadores de Unión por la Patria y de la UCR lograron aprobar una moción para votar este jueves el proyecto, que había sido eliminado del temario que también contiene la Boleta Única de Papel y la Ley de Financiamiento Universitario.
El primer cuestionamiento fue el del senador José Mayans (UxP) que insistió con el tratamiento del DNU 656/2024, que le da a la Secretaría de Inteligencia 100 mil millones de pesos de carácter reservado.
Este punto había sido quitado de la convocatoria original del Acta de Labor de la semana pasada, pero esta nueva convocatoria no contó con las mayorías necesarias y los bloques de Unión por la Patria y la Unión Cívica Radical no la firmaron. Ambas bancadas suman 46 senadores nacionales.
El radicalismo, a propuesta de su presidente de bloque, Eduardo Vischi, mocionó, y acompañó a Unión por la Patria para incluir el tratamiento del cuestionado Decreto de Necesidad y Urgencia. La presión que recibió el correntino en la última reunión de su espacio político fue fundamental: este jueves por la mañana, pasadas las 10, el radicalismo reabrió la discusión que habían dejado pendiente después de un Zoom del martes, cuando las voces a favor del rechazo del DNU del Gobierno fueron mayoritarias.
”Espero que podamos tratar el DNU (656/2024)”, señaló Pablo Blanco, senador por Tierra del Fuego, cuando ingresó al Senado y coincidió con lo expresado por otros legisladores radicales.
Ya en el bloque, en el segundo piso del Palacio, y en plena discusión, se pasó a votar. De los 13 senadores que integran el sector, nueve votaron en contra del DNU, una abstención y tres a favor del aumento del presupuesto para la SIDE: los senadores Eduardo Vischi, Víctor Zimmermann y Mariana Juri. Ese resultado terminó por inclinar la balanza hacia el rechazo en el recinto y fue el propio Vischi, como titular de la bancada, él que lo tuvo que proponer.
El radicalismo en la Cámara Baja mostró una división -como la que ocurrió en Diputados, pero no tan profunda- cuando Vischi se reunió con Javier Milei y los titulares de los bloques dialoguistas del Senado en la previa de la sesión de este jueves. De ella también participaron la vicepresidenta, Victoria Villarruel; el jefe de Gabinete, Guillermo Francos y la ministra Patricia Bullrich. En esa cumbre, y tratando de frenar una derrota segura en el recinto del senado, el Gobierno propuso por intermedio de Francos, la realización de una sesión especial reservada y secreta en el Senado, con la ministra de Seguridad, el titular de la cartera de Defensa, Luis Petri y el secretario de Inteligencia, Sergio Neiffert.
La intención de la reunión entre el oficialismo y los jefes de bloque fue lograr que el DNU de la SIDE pase a tratarse la semana próxima, en una sesión secreta. Esa propuesta se confirmó con una nota que Francos le envió a Victoria Villarruel en la misma tarde del miércoles. En ella, el Gobierno expresó: “En atención a la naturaleza del destino de los fondos asignados y que su publicidad afectaría el normal desarrollo de las tareas de los órganos que integran el actual sistema, corresponde establecer su carácter de reservado, en los términos de la ley N°25.520 y sus modificatorias”.
La propuesta fue rechazada por José Mayans: “No queremos ocultarle nada al pueblo argentino”, dijo en el recinto. Otro senador del PRO agregó en diálogo con TN que la idea de llevar a los funcionarios al Congreso no fue original: “Hace un mes se lo dije al Presidente, a Santiago Caputo y a Patricia Bullrich”.
Es que desde la oposición dialoguista entienden que es necesario tener argumentos de las necesidades gubernamentales, luego de que la Cámara de Diputados rechazara en agosto el DNU por 156 votos a favor, 52 en contra y seis abstenciones.
La decisión de Unión por la Patria y de la UCR de impulsar el tratamiento del decreto motivó que Villarruel dejara la sesión y que pase a manos de Bartolomé Abdala, el presidente provisional del Senado.
El DNU de aumento de fondos a la SIDE
El decreto presidencial señaló que luego de la disolución de la AFI se creó la Secretaría de Inteligencia del Estado y tras esa decisión se dispuso la creación del Servicio de Inteligencia Argentino (SIA), de la Agencia de Seguridad Nacional (ASN), de la Agencia Federal de Ciberseguridad (AFC) y de la División de Asuntos Internos (DAI) como organismos desconcentrados.
En virtud de ello, el Gobierno cree necesario “asignar partidas presupuestarias que permitan solventar, inicialmente, las acciones para la reorganización del Sistema de Inteligencia Nacional y el adecuado funcionamiento de los referidos organismos desconcentrados que lo integran”. Además, el DNU define que los fondos tendrán como principal destino el Sistema de Inteligencia Nacional para garantizar la seguridad, la defensa y la integridad de la República Argentina.
Con esos fundamentos se presentó el DNU que no encontró eco en la oposición que primero lo rechazó en Diputados y tendrá la misma suerte en el Senado Nacional.