En una insólita historia de amor, las hermanas brasileñas Rafaella y Alexia Vitória se casaron con los hermanos Thauam y Thales Ferraz en una doble boda que contó con más de 200 invitados.
Según contó Alexia a medios locales, conoció a Thales en la iglesia en 2018. Aunque en ese momento ella estaba en pareja y esperaron al fin de la relación, unos cuantos años más tarde, para tener una primera cita. Acordaron ir con sus hermanos respectivos al encuentro. Y ahí hubo otro flechazo: Rafaella se enamoró a primera vista de Thauam, y viceversa.
Las salidas de a cuatro continuaron hasta que llegó la propuesta de matrimonio en enero de 2023, durante unas vacaciones que se tomaron todos juntos en Ubatuba, en el litoral paulista. “Salimos a caminar por la playa, cuando regresamos nos pidieron que nos casáramos con ellos”, contaron las hermanas al sitio Sampi.
“Como empezamos a salir el mismo día y nos propusieron matrimonio el mismo día, todos juntos, entonces dijimos: ‘¿por qué no nos casamos juntos?”, contó Rafaella.
Los hermanos y hermanas armaron un grupo de WhatsApp para organizar la gran boda y, aunque no fue nada sencillo, lograron consensuar sus deseos. “Fue una parte muy delicada porque eran cuatro pensamientos distintos. Uno lo quería de una manera, otro de otra, fue una gran aventura. Empezamos a conectarnos, nos sentamos, nos reunimos, hablamos. Pero, al final, todo fue cómo realmente lo había soñado”, dijo Thauam al sitio g1.
El 25 de mayo se celebró la gran boda, al aire libre y con mucha emoción. Rafaella y Alexia llegaron en brazos de su padre, Alessandro Lopes Carvalheiro, mientras que Thales y Thauam llegaron al altar con su madre, Izabel Cristina Ferraz Moreira. “No perdí dos hijas, gané dos hijos”, afirmó la madre de las novias, Fernanda Cavalheiro.
¿Y para la luna de miel? Decidieron irse todos juntos a Chile, un viejo sueño de Rafaella.
Para vivir, los familiares habían comprado departamentos ubicados en frente uno del otro en un edificio de Franca pero una propuesta de trabajo que recibió Alexia en la ciudad de Santos torció por ahora los planes. “Fue muy difícil separarnos, fue muy malo, sufrimos mucho”, dijeron a g1.