El anuncio del veto presidencial a la Ley de Financiamiento a las Universidades Nacionales ya generó los primeros posicionamientos en los bloques parlamentarios. El oficialismo y la oposición reiniciarán las construcciones de mayorías como lo hicieron esta semana con el tratamiento de la reforma jubilatoria.
Desde el oficialismo, esperarán al decreto con el veto presidencial, pero ya planifican una nueva estrategia. El próximo lunes, al mediodía, se reunirán en la Casa Rosada los representantes de los bloques parlamentarios aliados. Cristian Ritondo del PRO, Gabriel Bornoroni de La Libertad Avanza y Oscar Zago del MID, con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y demás autoridades del Gobierno.
Buscan contrarrestar el peso de Unión por la Patria, liderado por Germán Martínez, desde Diputados, y José Mayans, en el Senado, quienes tratarán de construir mayorías con las otras fuerzas y esperarán a los sectores del Frente de Izquierda, que con sus cinco legisladores en la Cámara Baja, suman en total 104 diputados nacionales. Sin embargo, están lejos todavía de los 171 necesarios para lograr los dos tercios en la Cámara de Diputados.
Eso el oficialismo lo sabe, por eso pretende llegar a un número similar al alcanzado el pasado miércoles, cuando sumaron 87 votos en Diputados a favor de mantener el veto presidencial en el tema jubilaciones. Contemplado en ese número el voto del presidente del Cuerpo, Martín Menem.
Tras ratificar su postura de aumentar el presupuesto para las universidades, la diputada de Unión por la Patria, Sabrina Selva, le aseguró a TN que el mandatario “le quita el presente a nuestros abuelos y ahora el futuro a los jóvenes. Con este veto, Milei confirma que está muy alejado de la difícil realidad que atraviesan los argentinos y en estos nueve meses no tomó una sola decisión política que los tenga como una prioridad. Creo que se confunde. Se cree que le está dando la espalda al Congreso y le está dando la espalda a millones de argentinos”.
Desde el radicalismo, impulsor de esta iniciativa -que tuvo su primera votación en agosto y se aprobó por 143 votos afirmativos, 77 negativos y una abstención-, el diputado Pablo Juliano se expresó en las redes sociales: “Señor Presidente, el camino de vetar leyes no es la solución. La marcha del 23 de abril será un poroto al lado de la que vendrá para defender la universidad. La educación no es un gasto, es el futuro de un país libre y desarrollado”.
En esa misma línea se pronunció Martín Lousteau al asegurar que “aprobamos la Ley de Financiamiento Universitario porque para nosotros la educación es la posibilidad de soñar con un futuro mejor para nuestro país”.
La jornada maratónica de este jueves representó un fuerte revés para el Gobierno, porque además se votó en contra de los fondos reservados que le otorgaba el DNU a la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE).
El que se pronunció sobre eso fue el diputado Oscar Agost Carreño (Encuentro Federal): “Luego de un gran trabajo en el Congreso Nacional, se logró la anulación del primer DNU de la historia que pretendía desviar recursos públicos de manera irresponsable. Si no hay fondos para nuestros jubilados, no debería haberlos para inteligencia, a menos que el Gobierno justifique con claridad una amenaza real al país. Es hora de empezar a revisar las prioridades. No hay plata para los jubilados, ni para las universidades, ¿pero sí para la SIDE?”, se preguntó.
El rechazo al veto presidencial necesita los dos tercios de los presentes en la sesión para concretarlo. Es decir que, si concurren los 257 legisladores, esos dos tercios serían 171. El oficialismo, junto a los diputados del PRO, el MID y bloques menores, suman cerca de 80 voluntades como para bloquear esa construcción de mayorías.
Pero La Libertad Avanza ya demostró que puede sumar a otros bloques satélites e incluso lograr cambiar el voto de legisladores de la Unión Cívica Radical, como sucedió con los cinco diputados que fueron recibidos por el presidente Javier Milei en las horas previas al tratamiento del veto a la Ley de Movilidad Jubilatoria.
Con este objetivo, los libertarios incorporaron a su bloque a las dos diputadas de Buenos Aires Libre, Carolina Píparo y Lorena Macyszyn, sumando así 39 diputados nacionales.
Píparo, acompañada por Martín Menem, expresó en las redes sociales: “La prioridad del bloque Buenos Aires Libre fue, es y será siempre, fortalecer todas las vías institucionales que permitan que Argentina sea un país próspero. En pos de este objetivo común es que hemos decidido nuestra incorporación al bloque de La Libertad Avanza”.
“Confiamos en la unión y en el trabajo mancomunado en el Congreso de la Nación para conseguir las leyes que permitan que los argentinos vivamos cada día mejor y podamos construir el país que merecemos”, detalla el texto.