Las fuertes tormentas siguen asolando a Estados Unidos, con inundaciones mortales en el medio oeste y temperaturas extremas desplazándose hacia el sur. En el Medio Oeste, las lluvias provocaron que el agua alcanzara niveles críticos, forzando evacuaciones y causando la muerte de una persona en Dakota del Sur, según informó la gobernadora Kristi Noem.
Las inundaciones en Dakota del Sur han sido particularmente devastadoras. Kristi Noem declaró una emergencia en el sureste del estado. Varios ríos, incluyendo el Big Sioux, James y Vermillion, alcanzarán su nivel máximo entre el lunes 24 y miércoles 26 de junio.
“Quiero recordar a todos el poder del agua y su flujo, y mantenerse alejados de las áreas inundadas”, advirtió Noem durante una conferencia de prensa. En la comunidad de Dakota Dunes, cerca de las fronteras con Nebraska y Iowa, se emitió una orden de evacuación voluntaria para sus aproximadamente 4000 residentes.
Mientras tanto, en Michigan se confirmó la presencia de un tornado en la región norte del estado. El tornado, clasificado como EF-1, tocó tierra a unos 16 kilómetros al noreste del condado de Gladwin, con vientos de hasta 145 kilómetros por hora según el NWS y CBS News Detroit. Por fortuna, no hubo víctimas mortales ni heridos.
En Minnesota, el gobernador Tim Walz calificó las inundaciones en gran parte del estado como “catastróficas”. En Waterville, situada entre los lagos Tetonka y Sakatah, las inundaciones alcanzaron niveles históricos, forzando la evacuación de residentes. “Hemos tenido que desplegar la Guardia Nacional de Minnesota para asistir en la respuesta a estas condiciones climáticas extremas”, declaró Walz, según CBS News Minnesota.
Norwest Iowa también enfrenta desastres severos, con trece ríos desbordándose en el área. En la ciudad de Spencer, se impuso un toque de queda debido a las inundaciones que superaron el récord histórico de 1953.
La gobernadora Kim Reynolds solicitó al presidente Joe Biden una declaración de desastre mayor tras las “inundaciones catastróficas” que obligaron a algunas comunidades a evacuar. Según imágenes de drones divulgadas por el alguacil local, “solo se ven techos y copas de árboles sobre el agua”.
Ante este panorama de calamidad, el Servicio Meteorológico Nacional informó que regiones del noreste de Nebraska, sureste de Dakota del Sur, sur de Minnesota y noroeste de Iowa recibieron hasta ocho veces la cantidad promedio de lluvia para esta época del año.
Con más lluvias pronosticadas, las autoridades permanecen en alerta. “Debemos permanecer preparados y esperar lo mejor”, afirmó Lonnie Roemhildt, residente de Waterville, a CBS Minnesota.
El calor extremo se desplaza hacia el sur de EEUU
Entre tanto, gran parte del país sigue bajo alerta de calor, con más de 60 millones de personas en 21 estados sufriendo altas temperaturas. La ola de calor, que inicialmente afectó al Atlántico Medio, se desplaza hacia el sureste y las planicies sureñas. Se espera que las temperaturas se mantengan elevadas y alcancen nuevamente los 38°C a mediados de semana en el Atlántico Medio, informó el Servicio Meteorológico Nacional (NWS).
De acuerdo con CNN, los avisos de calor se extienden desde el norte de Florida hasta Dakota del Sur, regiones que experimentaron lluvias intensas y devastadoras inundaciones el fin de semana pasado. Las alertas de calor están vigentes en partes del norte de Iowa, el sur de Dakota del Sur, el este de Nebraska y el norte de Missouri y Kansas, que quedaron anegadas.
El suroeste de Estados Unidos se prepara para condiciones “parecidas a un monzón” debido al aumento de la humedad tropical, parte de la cual proviene de la tormenta tropical Alberto, informó el Centro de Predicción del Tiempo. Se esperan tormentas eléctricas hasta mediados de semana.
Si bien las lluvias pueden ser bienvenidas por los bomberos que combaten varios incendios activos en la región, el exceso de lluvia podría desencadenar inundaciones y corrimientos de tierra, dificultando el acceso a áreas quemadas.