Los femicidios de las hermanas Rayane Alves Porto (25) y Rithiele Alves Porto (28), quienes fueron secuestradas, torturadas y asesinadas a puñaladas por una banda criminal en la localidad de Porto Esperidião, conmocionaron a todo Brasil. Según un tío de las víctimas, quien prefirió no ser identificado, ambas nacieron en una familia vinculada al mundo del circo y siempre fueron muy alegres.
”Nacieron en el circo. Su padre y abuelo eran dueños de un pequeño circo, pero la pandemia obligó a su cierre. Tras esto, se mudaron con su abuela paterna en Indiavaí, y después, hace unos 2 años, se trasladaron a Porto Esperidião para estar cerca de su abuelo materno, en Glória D’Oeste, donde fueron enterradas el domingo”, comentó.
Rithiele estudiaba Derecho, mientras que Rayane trabajaba como maquilladora. En paralelo, esta última había sido invitada a postularse como candidata a concejala en las próximas elecciones municipales. “Era su primera vez en política, pero lamentablemente ocurrió esta tragedia”, lamentó su tío.
La mayor de las dos hermanas, también quería vincularese con la política, pero desde su futuro rol de abogada.
Las jóvenes nunca tuvieron vínculos con facciones criminales, y la foto señalada como motivación del crimen fue un malentendido, según aseguró el tío: “Ellas no tenían relación con eso. Eran chicas responsables, maduras e íntegras”.
Las mujeres fueron secuestradas al salir de un festival junto a su hermano y al novio de una de ellas, que logró escapar y alertar a la policía. De acuerdo a su relato, los delincuentes los llevaron a una casa, donde los torturaron.
El gesto en un posteo en redes que habría motivado el crimen
El móvil del crimen, según el novio de Rithiele, fue que las víctimas se habían tomado una fotografía en el río Jauru, haciendo un gesto asociado a una facción rival, el Primeiro Comando de Capital (PCC).
“A priori la motivación sería esta foto. Captaron a las víctimas en una fiesta en Beira Rio, en la misma fiesta registraron los celulares de las niñas y luego las llevaron a la casa. Mientras las torturaban, llamaron a los familiares y les pidieron 100.000 reales″, explicó al sitio g1 el comisario Higo Rafael. La policía afirmó que no existe evidencia de que las jóvenes estuvieran involucradas en prácticas ilícitas.
Crímenes ordenados desde una cárcel
Por los crímenes detuvieron a once personas, que fueron acusadas de “homicidio doloso, tortura mediante secuestro, tentativa de homicidio y lesiones corporales”.
Además, investigan si los ataques fueron ordenados por un hombre detenido en el Penal Central del Estado (PCE), en Cuiabá. Según indicó el comisario Rafael, el delincuente pasó cerca de tres horas en videollamada con los autores del crimen y guió las sesiones de tortura. En su celda, incautaron un celular que será sometido a pericias en las próximas horas.
Las hermanas fueron enterradas el domingo en medio de una fuerte conmoción. “Con inmensa tristeza y profundo pesar anunciamos el fallecimiento de nuestra querida amiga y candidata a concejal Rayane, y su hermana Rithiele. Esta trágica pérdida deja en todos nosotros un dolor incalculable”, declaró el candidato a la alcaldía de Porto Esperidião, Herculis Albertini (PSD).