El amor llegó nuevamente a Cuestión de peso (eltrece). Camila Deniz, quien volvió a la competencia después del repechaje, habló por primera vez de su romance con Gabriela Natalie Atamián, quien ya alcanzó su peso ideal y fue dada de alta.
“Nunca estuve con una mujer, es la primera vez. Y quiero dejar en claro que no me gustan las mujeres, pero me gusta ella”, comenzó contándole “Camilota” a Mario Massaccesi.
Tras asegurar que está “feliz”, la concursante añadió: “Lo que buscaba en un hombre lo tiene ella”.
En ese sentido, contó cómo reaccionó su familia frente a este romance: “Me costó mucho contarle a mi familia. Thiago fue el último al que le conté porque no sabía cómo iba a reaccionar, y me dijo que si era feliz le diera para adelante”.
La novia de Camila apareció repentinamente en un móvil y dio más detalles de cómo surgió el amor. “Había miraditas desde la primera semana del programa”, aseguró. Deniz la interrumpió y lanzó: “Estando de novia con Marcelo (otro participante del ciclo) yo estaba con ella!”.
“Natee” soltó por su parte: “Marcelo nos chamuyaba a las dos, había onda con las dos. Y después como que hubo algo y después al final elegimos con Cami estar juntas cuando ella estaba con Marcelo. Con Marcelo después ya no había nada y Marcelo quería trío”.
Para cerrar, Gabriela reveló la fecha exacta del inicio del noviazgo: “Hace dos semanas ella me propuso ser la novia y acepté”.
Cuál fue la comida que dejó a Camilota afuera de “Cuestión de Peso”: “Subiste 800 gramos”
Camilota había quedado eliminada de Cuestión de Peso a principios de mes. Era algo que tarde o temprano ocurriría debido a sus deslices constantes con el tratamiento, según reconoció. Antes de subirse a la balanza, que le anunciaría el final de su participación, contó que había tenido un fin de semana de excesos y enumeró lo que había comido.
Sin vueltas, Camila Deniz expuso que un fin de semana ingirió tres milanesas a la napolitana con ensalada de lechuga, tomate y cebolla morada, aunque aclaró: “Fueron del tamaño de la palma de la mano”. Acto seguido, dijo que también hubo postre, en referencia al sexo. “Se va uno y vienen tres”, indicó en referencia a la desilusión que se llevó con uno de sus compañeros de reality.
“Comí emocional. La culpable de todo soy yo. Las cociné fritas y después al horno. Les puse tuco sin sal y un pedacito de queso. Me siento culpable”, pronunció luego, pero el destino ya estaba marcado: había subido 800 gramos. Finalmente, logró volver al ciclo, ya que se impuso en el repechaje.