En las últimas horas, Sean “Diddy” Combs quedó mucho más comprometido judicialmente en la causa en la que está detenido. La Justicia allanó la celda en la que está preso y encontró pruebas de que el rapero buscó intimidar a familiares de los denunciantes que lo acusan de abusos reiterados.
De acuerdo a lo que publicó el medio NBC News, los policías encontraron ocho páginas de una agenda en la que Diddy en las que escribió notas en las que deslizó datos sobre posibles sobornos de testigos. “Buscaba encontrar información sucia sobre las víctimas”, aseguraron las fuentes judiciales consultadas por ese canal.
Durante una audiencia que ocurrió esta semana, los fiscales acusaron a Combs de intentar influir en los testigos mientras sigue preso. El operativo se había hecho como parte de una investigación en curso por las sospechas que tenían de lo que podía llegar a hacer el cantante.
El equipo de defensa de Combs negó las acusaciones de los fiscales, que también incluyeron un relato de una supuesta llamada ocurrida el 14 de octubre, hecha por Diddy a un miembro de su familia, para trabajar con alguien que no sea abogado y “encontrar información sobre uno de los acusadores”.
“La conclusión es que ninguna iniciativa de aplicación de la ley de varias agencias justificó revisar las notas personales escritas a mano del señor Combs sobre las conversaciones con sus abogados, y los argumentos de los fiscales en sentido contrario carecen de toda credibilidad”, declaró el representante legal de Diddy, oponiéndose a lo que ocurrió.
El presente de Diddy en la cárcel y el futuro de la causa judicial
Desde que arrestaron a Diddy hasta el presente, el productor musical recibió más de 20 denuncias en total, que siguen incrementándose. El principal abogado de las víctimas, Tony Buzbee, dijo que tenía al menos 100 demandas para presentar en los tribunales.
El rapero está preso acusado de obligar a mujeres y hombres a cometer, mientras estaban drogados, actos sexuales conocidos como Freak Offs, que quedaban registrados en videos.
Las torturas duraban días y las víctimas recibían medicación intravenosa para recuperarse. Los investigadores sostuvieron que el músico grababa los actos sexuales para, luego, chantajear a las víctimas.
La Policía encontró en los allanamientos a sus propiedades cientos de videos donde se ven los abusos, drogas, miles de botellas de aceite para bebés, armas de fuego y municiones. Diddy enfrenta penas que van, de mínima, desde los 15 años hasta la cadena perpetua.
