Los jóvenes comenzaron a sufrir fuertes dolores de estómago después de comer un plato de pollo frito con arroz. Su exmarido sospecha que también intentó envenenarlo en otra oportunidad.
Una mujer de 40 años fue detenida este domingo y acusada de haber envenenado a sus hijos, una joven de 18 años y un nene de 12, en la ciudad de Belo Horizonte, Brasil. La adolescente murió el domingo y el nene se encuentra internado, en estado grave, en el Hospital de Pronto-Socorro João XXIII.
La mujer fue identificada como Viviane Leonarda dos Santos, de 40 años, y la Justicia le dictaminó prisión preventiva.
El crimen habría ocurrido el martes pasado. Según el informe policial, los dos jóvenes comenzaron a sufrir fuertes dolores de estómago después de comer un pollo frito con arroz, cebolla y porotos en la casa familiar, en el barrio Jardim dos Comerciários.
La comida, según consta en el expediente, fue preparada por la mujer.
El padre de los chicos dijo que se sintió mal después de tomar un café en lo de su ex
El padre, que se había separado de ella desde hace unos cinco meses, fue llamado para ayudar a las víctimas y los niños fueron trasladados de urgencia al centro médico. Isadora dos Santos Oliveira, de 18 años, no sobrevivió. El otro hijo, de 12 años, permanece hospitalizado en estado grave.
En declaraciones a la policía, el hombre dijo que se separó de su esposa por “actos descontrolados” de la mujer y “acoso nocturno que le impedía dormir”.
El padre de los chicos también declaró que recientemente se enfermó después de tomar un café en la casa de su ex. En ese momento padeció dolores intestinales, diarrea y vómitos.
La madre de Viviane, por su parte, dijo que su hija tiene antecedentes de problemas psicológicos, con cambios bruscos de humor, pero nunca habría mostrado signos de violencia grave.
El documento policial también señala que la sospechosa utiliza medicación psiquiátrica, pero Viviane declaró haber suspendido su tratamiento médico. También afirmó que no sabía qué pudo haber causado el envenenamiento.
La mujer fue trasladada a la cárcel de Vespasiano, en la región metropolitana de Belo Horizonte, luego de prestar declaración en la comisaría. Su abogado afirmó que “hasta el momento no hay pruebas concretas de que los alimentos elaborados hayan provocado la muerte” y que solo los resultados de los informes y del examen forense podrán determinar la causa de la muerte de su hija.
